Este miércoles, el Ministro de Relaciones Exteriores y Culto de la República Argentina, Jorge Faurie, recibió a Lidia Guerrero, la madre de Víctor Saldaño, el cordobés que está condenado a muerte en Estados Unidos y que desde 1996 permanece en el llamado "corredor de la muerte" por el asesinato de un comerciante.

En el encuentro, además, estuvieron presentes funcionarios de derechos humanos, consulares, jurídicos de este Ministerio y el asesor letrado de Guerrero ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Dr. Juan Carlos Vega.

En un comunicado de prensa de Cancillería se informó que “en la reunión se compartió información sobre el estado de situación que tiene el caso, que en esta etapa, luego del segundo juicio, será llevado a la Corte Suprema de Justicia de los EEUU”.

Y expresaron que “Argentina hace gestiones para sumar apoyo para que la Corte considere favorablemente la admisión del caso con el fin de conmutar la pena de Saldaño, de acuerdo a la recomendación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”.

Precisamente, la CIDH , a través del Informe de Fondo 76/16 -dictado en 2016- hizo lugar a las pretensiones de Vega, argumentando que las decisiones de las cortes norteamericanas estuvieron viciadas por estar fundadas en discriminación por raza y nacionalidad. También declararon que el corredor de la muerte no es una cárcel sino un sitio técnico de tortura.

El caso
En 1995, en la ciudad de Plano, Texas, Saldaño junto su amigo mexicano Jorge Chávez, fueron acusados y posteriormente condenados por el asesinato de Paul King, en la ciudad de Dallas. Chávez confesó su culpabilidad, por lo que recibió cadena perpetua. Saldaño fue condenado a muerte por inyección letal.

Esta primer condena fue declarada nula por la Corte Suprema, luego de concluir que había habido elementos de discriminación por raza y nacionalidad. Por esa razón, el máximo tribunal ordenó al Poder Judicial del estado sureño llevar a cabo un nuevo juicio que no estuviera viciado.

Sin embargo, la nueva corte también declaró culpable a Saldaño, y otra vez lo condenó a muerte. Para este entonces la salud mental del argentino ya se encontraba completamente devastada luego de haber pasado nueve años en condiciones de aislamiento extremas. Por esta razón su defensa legal solicitó, sin éxito, que fuera trasladado a un neuropsiquiátrico.

Este segundo caso contra Saldaño fue apelado en distintas instancias y será llevado a la Corte Suprema del país. Su madre, inclusive, acudió hasta el Papa Francisco -quien se ha manifestado en contra de la pena capital- con la intensión de que intercediera en el caso.