El diario La Nación publicó el día viernes un editorial titulado "Niñas madres con mayúsculas". El texto defiende que las niñas violadas continúen con sus embarazos y a su vez repudia el aborto, a pesar que la legislación de 1921 avala la práctica en el caso de que corra riesgo la salud de la niña y en casos de violación.

El escrito comienza: "Los pañuelos verdes de quienes no han aceptado la derrota legislativa siguen agitándose". Luego, el editorial, trata al "instinto maternal" como "lo que es natural en la mujer".

La nota se ganó el repudio de amplios sectores de la sociedad.

Diversos organismos también emitieron comunicados institucionales refiriéndose a la nota.

UNICEF Argentina remarcó: "El embarazo en la infancia no está vinculado al “instinto materno”, es abuso sexual y por tanto el embarazo es forzado. Los adultos (familia, Estado, instituciones) son responsables de proteger a las niñas y niños frente al abuso sexual".

"Abogamos por proteger a las niñas en situaciones de abuso, evitando que vuelvan a ser victimizadas. Es obligación de los Estados garantizar esta protección: es un derecho humano", agregó.

Fundación Huésped expresó: "El embarazo infantil está íntimamente ligado al abuso. La maternidad forzada es una forma de tortura y suma una violación más a los derechos de estas niñas".

En la misma línea, Amnistía Internacional declaró: "El editorial de La Nación de hoy desconoce los Derechos Humanos de las niñas. Cualquier contacto sexual con una niña menor de 13 años es un abuso sexual".

Desde la política, actores de diversos espacios manifestaron su rechazo bajo la consigna #NiñasNoMadres.

"Dice la editorial de La Nación "lo que es natural en la mujer, lo que le viene de su instinto de madre, lo que le nace de sus ovarios casi infantiles" para justificar la maternidad forzada producto de la violación de una niña. Duele leerlos. Increíble y perverso", expresó la diputada radical Brenda Austin.

Nicolás del Caño, diputado del Frente de Izquierda, declaró: "Editorial de La Nación habla de instinto maternal en las niñas violadas y obligadas a ser madres. Siempre defendiendo la tortura!! Hay que redoblar la pelea en las calles para conquistar el #AbortoLegalya y que estos dinosaurios se vayan al basurero de la Historia".

Debido a la repercusión del editorial, el diario lanzó una nota que concluye: "LA NACION lamenta que se haya interpretado el texto como un mensaje de alguna forma tolerante hacia los abusos a menores, algo que, como el mismo editorial señalaba, es a todas luces repudiable".