Las costumbres perduran pese a las distintas situaciones en las que suelen convergen los territorios.

En ese sentido se explica que el 2018 haya sido, en Argentina, el año de la historia en la que más yerba se consumió, con un total de 261,9 millones de kilos.

Así lo informó el Instituto Nacional de la Yerba Mate, remarcando que el promedio se ubicó en los seis kilos por habitante en todo el período.

El titular del organismo, Alberto Ré, consideró que “la gente siguió tomando mate en un contexto difícil”, en referencia a la crisis económica y financiera.

El récord histórico en consumo interno superó en dos millones de kilos la última marca récord, aunque el año también marcó un crecimiento en las exportaciones. Fueron 38,6 por ciento arriba de lo ocurrido en 2017.

“Hay una especie de descubrimiento de las cualidades de la yerba en el mundo. Lo de los jugadores que lo toman y lo difunden ayuda mucho. El mate como lo tomamos nosotros es una forma muy de nuestro país y vecinos, pero para salir al exterior hay que apuntarle a la infusión, tipo mate cocido, o como bebida fría”, confió este lunes, en diálogo con radio Universidad.