El horror se hizo piel en decenas de miles de personas durante la dictadura militar en nuestro país. De manera directa e indirecta, perdieron la vida o sufrieron las consecuencias del terrorismo de Estado.

Juan Carlos "Milonguita" Heredia contó en radio Universidad que tuvo la posibilidad de jugar el Mundial '78 vistiendo la camiseta de España, pero que él mismo se negó a viajar.

Con su tono inconfundible, contó el temor que aún le generaba un hecho vivido poco antes de la Copa del Mundo. El escenario fue la casa de sus padres, en barrio Altamira, y la gran cantidad de afiches con los que el hogar estaba empapelado, ofició de "salvación".

En aquel momento Heredia jugaba en Barcelona e integraba el seleccionado que era dirigido por Ladislao Kubala. Sus posibilidades de estar en el torneo eran muchas, pero un hecho que cambió todos sus planes.

“Un día golpean la puerta en la casa de mis padres. Mi mamá abre y eran los militares”, dijo y siguió con la anécdota: "Buscaron a mi padre, lo sacaron y le dijeron ‘Donde vas vos no te hace falta ropa’. Y lo taparon con una sábana. Hurgaron toda la casa, nos afanaron un encendedor de oro que yo le había regalado y a él se lo estaban llevando. Pero justo entró otro militar y le dice ‘Este es la Milonguita, está jugando en el Barcelona. ¿Tan fanático van a ser?’. ‘Somos el papá y la mamá’, dijo mi viejo desde debajo de la sábana".

Al caer en la cuenta, les dijeron: "Señora disculpenos. ‘Che, están equivocados, esta es la Milonga’, dijo”. Y salieron.

Aún lamentando aquella situación, el exfutbolista reflexionó: "Yo estuve en el club de mis amores, que es Belgrano, jugué en el mejor club del mundo, el Barcelona... y para mí el Mundial hubiese sido lo máximo. Pero no podía hacerlo. Ellos me entendieron".