El capo de la mafia italiana Rocco Morabito protagonizó en la medianoche del lunes una fuga de película.

Escapó por los techos de la cárcel de Montevideo donde se encontraba recluido desde 2017, a la espera de su extradición a Italia. Morabito, quien fue el número uno de la 'Ndrangheta (la mafia calabresa) se escapó junto a otros tres criminales internacionales de la prisión uruguaya.

"Sobre la medianoche cuatro personas con arresto administrativo que se encontraban alojados en el Centro de Ingreso, Diagnóstico y Derivación del INR, se fugaron por las azoteas del edificio mediante boquete", detalla un escrito de la Unidad de Comunicación del Ministerio del Interior (Unicom) de Uruguay. En su fuga, pasaron por una casa colindante y robaron dinero a su propietaria, agrega el comunicado.

Además de Morabito se fugó Leonardo Abel Sinopoli Azcoaga, detenido por un delito de falsificación de documento y hurto, a solicitud de la justicia de Brasil, así como, Matías Sebastián Acosta González, a la espera de su extradición a Brasil, y Bruno Ezequiel Díaz, detenido por un delito de homicidio a solicitud de la justicia argentina.

Como si fuera una película clase B, Élida Ituarte, de 60 años, se llevó el susto de su vida cuando salió de su habitación de noche y se encontró con tres hombres en el pasillo de su casa.

"Somos del consorcio, venimos a arreglar un caño (tubería)", dijo uno de los hombres para explicar su presencia. Pero Morabito le contó que tenía que irse porque su hija estaba enferma, según informó la prensa local.

Le pidieron la llave de su casa, le robaron 3.000 pesos (unos 88 dólares), en ningún momento le hicieron daño y cuando llamó a la policía para hacer la correspondiente denuncia un agente explicó: "Usted, cuando esté solita, mire siempre adentro de los roperos".

¿Accedió Morabito a la vivienda por un armario? Las primeras informaciones solo indican el italiano y otros dos sujetos salieron de la prisión a través de un boquete y huyeron por las azoteas y luego accedieron al edificio colindante y a la casa de Élida Ituarte. Un cuarto sujeto escapó por una puerta de Jefatura.

Morabito había sido arrestado en Uruguay a principios de septiembre de 2017 después de permanecer durante 23 años prófugo. Quien fue uno de los cinco huidos más peligrosos de Italia vivió en el país sudamericano diez años con un pasaporte brasileño bajo la falsa identidad de Francesco Antonio Capeletto Souza. La Policía lo detuvo en un hotel de Montevideo, pero vivía en una lujosa mansión en Punta del Este. En su domicilio fueron encontradas doce tarjetas de crédito, trece teléfonos móviles, cheques y armas.

El capo mafioso, apodado también 'U Tamunga' por el indestructible 4x4 del ejército alemán que solía conducir cuando vivía en Calabria, edificó su reputación en Milán. Se trasladó a esa ciudad del norte italiano a los 25 años, convirtiéndose en el rey de la cocaína. Desde allí comenzó a extender la red de distribución de narcóticos con la que la Ndrangheta ha multiplicado su tamaño y peligrosidad en los últimos años convirtiéndose en la principal mafia de Italia.

En Sudamérica se ocupaba de hacer llegar la droga desde este continente al norte de Italia, según los investigadores del caso.

A estas horas el dispositivo para encontrar a Morabito y sus cómplices se desarrolla por toda la ciudad mientras entre la ciudadanía todos son incógnitas: ¿Cómo pudo escaparse semejante delincuente internacional?

El gobierno uruguayo abrió dos investigaciones. Rocco Morabito ya había ofrecido 80.000 dólares a policías para que lo ayudaran a fugarse. Así consta en un informe policial redactado hace un año, alertando que el mafioso intentaría escaparse de Cárcel Central.

“Es desconcertante y grave que el criminal Rocco Morabito, jefe de la ’Ndrangheta, lograse escapar de la cárcel en Uruguay mientras esperaba ser extraditado a Italia”, planteó ayer el vicepremier italiano, Matteo Salvini, a través de Twitter. El gobierno italiano anunció que pedirá “explicaciones inmediatas” a Uruguay.