El martes 21 de enero, la compañía “Chasca Cirko” de Villa San Isidro (integrada por Guadalupe “Lupita” Muñoz Reviglio y Lautaro “Muraroto” Capella, dos artistas emprendedores de la región), comienza una gira continental por Sudamérica, que pretende recorrer 20 mil kilómetros con funciones, talleres y encuentros.

Sin fecha precisa de retorno, se lanzan a esta aventura con la premisa de viajar “donde el circo y los recursos nos lleven”.

Qué es“Chasca Cirko” ?

Es el espacio organizador del Encuentro Nacional de Circo para niñes y adolescentes que ya lleva cinco ediciones en Villa San Isidro. Y “Lupita” y “Muraroto” son los protagonistas de un sorprendente espectáculo que cada verano en la Plaza Solares de Alta Gracia, se lleva los aplausos de cientos de turistas y vecinos, conjugando el humor con la acrobacia.

En este caso, movilizados por la idea de “compartir con públicos de distintos puntos de Latinoamérica”, según explica Guada a diariotortuga.com, es que se empieza a armar este viaje, que tiene algunas fechas confirmadas, algunos recorridos estimados y también la expectativa abierta a cuantas impensadas nuevas rutas puedan presentarse en el camino. “Se trata de llevar nuestro trabajo a través del circo, tratando de llegar a comunidades, pueblos y ciudades que no siempre tiene acceso al arte circense”, señala Guada, precisando que el arranque es en San José de la Dormida. Que luego, hacia el norte, está previsto llegar a Salta, donde compartirán su arte en la Universidad del Monte, con comunidades wichí. Que también estarán en San Salvador de Jujuy y en Tilcara. Inicialmente habían confirmado algunas fechas en Bolivia pero considerando la crisis socio política que atraviesa el vecino país, decidieron cruzar a Chile, donde actuarán en Calama e Iquique. Desde allí seguirán hacia Perú, donde tienen confirmada una fecha en Arequipa y la participación en un festival de teatro comunitario en Lima, que se realiza en barrios periféricos. Ecuador, Colombia, Venezuela siguen en el itinerario inicial, desde donde empezaría la vuelta a través de Brasil, tomando un ferry para cruzar el Río Amazonas durante diez días y recalar en Belém, en el último tramo para volver a nuestro país.

Por cuánto tiempo ?

El viaje puede durar dos meses o un año, anticipan. “Las fechas se van a ir definiendo; si bien tenemos una ruta prearmada, queremos que nos vayan llevando el camino y las necesidades”, expresa Guada, quien agrega que para este viaje, pensado también como una experiencia familiar, lograron comprar un vehículo.

Programa:

Para compartir, “Chasca Cirko” lleva dos funciones. Una, la que se conoció en la Plaza Solares de Alta Gracia, “Échale semilla, una historia de amor en el aire”, más callejera y familiar, que conjuga humor con acrobacia. La otra, más nueva, es una obra infantil pensada para sala, que homenajea a María Elena Walsh y lleva por nombre, “El Circo del Revés”. También lleva talleres de formación para formadores, de acrobacia aérea y un conversatorio para compartir la experiencia que les viene dejando el Encuentro Nacional de Circo para niñes y adolescentes de cada año en San Isidro.

Propósito:

Guada y Lautaro entienden este viaje como una forma de nutrirse “de la cultura, las miradas y risas de otrxs hermanxs latinoamericanxs”. Y Guada, sabiendo el potencial humano que tiene el arte circense, concluye, en la charla con este medio: “Lo hacemos para hacer este mundo un poco más justo. Y con mucho amor”.

"Lupita" y "Muraroto" se van de viaje por Latinoamérica.