Ya hace mucho tiempo que los videos virales forman parte del cotidiano y cada tanto alguna fecha es motivo para recordar a los que más hicieron historia. Una especie de grandes éxitos nostálgico, un rescate emotivo.

Tal es el caso de la obra más conocida de PSY, un artista oriundo de Corea del Sur que, el 15 de julio de 2012, lanzaba el video del corte de difusión de su sexto disco: una canción llamada "Gangnam Style".

Park Jae-Sang -como se llama en realidad- tenía 35 años por ese entonces y, me arriesgo a apostar, no se imaginaba el éxito que acaba de entregarle a Youtube en bandeja. En poco tiempo, "Gangnam Style" se viralizó y llegó a ser el video más visto en la red social de videos. 

No fue la letra, en su mayoría cantada en coreano, no fue la música, una base propia de la música electrónica, no fue él, cuya imagen se aleja de los estereotipos del K-Pop. Lo que generó el boom fue la coreografía del video, el pasito de cabalgata que repite una y otra vez.

Un pasito que se vio en fiestas de 15, eventos especiales, grandes estadios, en las casas de familia, en la TV y hasta en películas. Un gesto que, incluso, llegó a ser incluido en el popular juego Fortnite a principios de este año.

La cuestión es que el video superó las 4 mil millones de reproducciones en Youtube y se convirtió en el más visto de la plataforma hasta ese momento. Pero su autor, sin estar muy errado, temió que fuera el pico de su carrera

El miedo a no poder repetir el éxito, pese a que a "Gentleman", el tema que sacó después, superó las mil millones de reproducciones, lo pasó por encima. Se separó, se hizo adicto al alcohol y, tras un tiempo, debió calmarse, bajar las expectativas. 

Aunque no dejó la música, su éxito sucede principalmente en su país natal y alrededores. No fue un artista que pudiera hacer giras mundiales, es un One Hit Wonder (artista de un solo hit). Incluso, valora el propio PSY, no es reconocido en otras partes del mundo, lo que le permite no sufrir el peso de la fama y caminar por las calles tranquilo.