Hilda Isabel Gorrindo Sarli, la "Coca Sarli" marcó la historia del cine argentino y el inicio de una etapa de liberación artística en el séptimo arte. Desprejuiciada frente a cámara, la Coca se atrevió a romper con cánones de ética protagonizando películas de alto contenido erótico en los 60.

De una belleza sobresaliente, Sarli hizo su primer desnudo frente a cámara en El trueno entre las hojas. Sus películas siempre fueron dirigidas por su pareja, Armando Bó, a quien rotuló como "el amor de su vida"

En 1955, cuando tenía 20 años, logró popularidad mundial ganando el concurso de Miss Argentina. A partir de entonces comenzó una carrera ascendente en la que se contabilizan aproximadamente 30 películas con Armando Bó, muchas de las cuales son consideradas "de culto".

Sufrieron la censura, la crítica y desaires por sus producciones que eran desafiantes desde la ética y moral de la década del 60. Sin embargo, cada vez que estrenaban un título lo hacían a sala llena. Incluso triunfaron en países como Paraguay, Estados Unidos, Rusia, México y Japón.

En los últimos años de vida Isabel confesó que fue víctima de acoso en muchas oportunidades. Dentro del set de fimación y fuera de él padeció situaciones que la intimidaron y muchas veces callo por vergüenza. Sarli asegura que en su vida privada y en la intimidad siempre fue una mujer tímida.

La Coca siguió su carrera que parecía imparable hasta que en 1981 murió Armando Bó. Su muerte le causó una depresión que la retiró de la actividad. Paradojicamente, esa bomba sexual señalada por una sociedad pacata como ninfómana, apagó su brillo por amor.

Tuvo un breve retorno a la pantalla grande de la mano de Jorge Polaco en la película La dama regresa, pero ya nada era igual. Probó suerte en en 1998, debutando en el teatro de revistas en la obra Tetanic. En 2004 tuvo una participación especial en la telenovela Floricienta.

En 2009, Isabel fue parte de dos producciones Mis días con Gloria y Arroz con leche.

Aunque no con justicia, el reconocimiento de la artista fue en vida. En primer lugar porque sus películas fueron consideradas de culto, en sugundo porque fue una precursora en la revolución social, sexual y artística.

En el 2010, la Sociedad Fílmica del Lincoln Center de Nueva York organizó un homenaje en su nombre y armó un festival con la exhibición de seis de sus producciones que fueron consideradas "un ejemplo del cine kitsch de los años '60 y '70".

Su vida personal fue marcada por Armando Bó. Antes de conocer al cineasta, Sarli había estado casada un año con Ralph Heinlein, un descendiente de familia alemana. No tuvo hijos biológicos con ninguno de los dos pero adoptó a Isabelita y Martín.

Sarli se encontraba internada desde algunas semanas en el Hospital Central de San Isidro por un cuadro respiratorio y esta mañana se confirmó su fallecimiento.

Isabel tenía 83 años y murió acompañada de su hija Isabelita. En los últimos años había tenido otras internaciones y su salud fue motivo de preocupación. En 1992, la operaron de un tumor cerebral y se recuperó favorablemente. En 2011 tambien salió adelante luego de haber sido hospitalizada por un edema pulmonar.

HOMENAJE A ISABEL SARLI