Raffaella Carrá es italianísima, pero Argentina ocupó un lugar especial en su corazón. Y quizás es por esa visión egocéntrica que se nos atribuye a los argentinos, pero lo cierto es que la diva platinada supo ganarse el afecto de este país del sur.

Su vínculo con Argentina fue profundo. En primer lugar, porque sus canciones se volvieron éxitos también aquí y cómo no hacer propio su himno Hay que venir al Sur, esa canción que habla del amor, los buenos amantes y el enamoramiento pleno.

Raffaella forjó gran amistad con Diego Armando Maradona. Cuando el futbolista pasó por Nápoles, no pudo escapar de los programas de televisión de Raffaella,y durante años se los vio juntos en diferentes festejos. Cuando Maradona falleció, Raffella aseguró: "Nos dejó demasiado pronto. Un gran dolor. A mí que no me gusta hacer vídeos para amigos, hice una excepción y le hice un cortometraje por sus sesenta años. Se lo enviaron y me dijeron que estaba conmovido de verlo. Éramos muy amigos. Era un bribón, pero muy generoso, capaz de dar saltos increíbles a pesar de su peligrosa vida entre las drogas y el alcohol".

Susana Giménez también fue importante para la vida de Raffaella, o más bien al revés. Cuando en italia la diva estrenó Pronto, Raffella?, Susana encontró el formato para su famoso Hola Susana. Ambas rubias, irreverentes, desafiantes de los cánones de la moral y con aires de diva, forjaron después una buena relación y Susana en más de una oportunidad declaró ser su fan.

Además, en 1967 Raffaella y Jorge Martínez protagonizaron un musical por lo menos, extraño. Bárbara fue el nombre de la pieza en la que  Martínez interpreta al misterioso heredero de una pequeña nación y se ha enamorado de una famosa cantante italiana que acaba de llegar a la Argentina. ¿Qué hace el príncipe en una conferencia de prensa haciéndose pasar por fotógrafo?, nadie lo sabe, pero es amor a primera vista. Y ya se sabe, el amor es así, inexplicable, como el guión de la película.

Como ambos están en Buenos Aires el romance se desarrolla en la ciudad, hablando todos en castellano. Pero hay canciones en inglés, españo e italiano. El film fue rodado durante la dictadura militar pero no hay referencias a eso.  A partir de los números musicales vemos los Bosques de Palermo, la Facultad de Derecho, La Boca, Retiro, el Planetario, el Obelisco, el Congreso y hasta la Torre de los Ingleses.