Florencia Santillán es una joven militante de los derechos de las mujeres y las disidencias sexuales, y de los derechos de las personas con discapacidad en villa Carlos Paz.

Con una silla de ruedas desde el año 2016 la pelea a diario por la inclusión y la accesibilidad, en ciudades que no están pensadas ni planificadas para todos y todas.

Florencia, cuando tenía 23 años, estudiaba comunicación social en la Universidad Nacional de Córdoba. En ese momento le diagnosticaron polineuropatía mixta desmielinizante, una patología que impidió seguir caminando.

A pesar de ello, no bajó los brazos y se transformó en una referente de la lucha por los derechos de las personas con una discapacidad funcional.

Además, participa activamente de la organización Ni una menos Villa Carlos Paz e integra la Asociación Civil Empoderar, contra a violencia de género. 

Luego de dos años, lanza -junto al periodista Santiago Solans- su biografía titulada Maldita lisiada, proyecto autogestivo.

 En formato de e-book, su historia llega como invitación “a repensar, empatizar y reivindicar ideas”, en plena pandemia por coronavirus.

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