En la mañana de este jueves Mirtha Legrand fue internada en el Instituto Mater Dei por manifestar malestares físicos. 

Debido a la arritmia que se le detectó los médicos decidieron colocarle dos stets para facilitar la circulación sanguínea.

Mirtha Legrand se sometió este jueves a un estudio de rutina luego de que los médicos le detectaran una arritmia, por lo que decidieron someterla a la aplicación de dos stents que faciliten su circulación, para un mejor estado de salud.

Según informaron en el parte médico que dio a conocer el mismo sanatorio, Legrand se encuentra en buen estado de salud y de buen ánimo. Allí mismo señalan que tras un estudio se encontró una obstrucción coronaria: “Se le realizó una cinecoronariografía encontrándose una obstrucción coronaria, resolviéndose con la colocación de dos stents”.

¿Stent qué es y cómo funciona?

Un stent es una prótesis vascular que tiene forma de malla tubular metálica cilíndrica y se monta sobre un “balón”, es decir, una pequeña manguera que se coloca dentro del stent y luego se infla. Al hincharlo a nivel de la obstrucción coronaria hace recuperar el diámetro de la arteria tapada y de ese modo normaliza la circulación de la sangre, así lo explica el Instituto Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA).

Estos dispositivos se emplean para desobstruir las arterias coronarias que se cierran o tapan y que son las encargadas de llevar la sangre al corazón, además de que reducen el riesgo que el área tratada vuelva a obstruirse.

Hay tres tipos de stent. El primero es el convencional, que normalmente es de acero o cromo-cobalto, se trata de los más simples y económicos, pero tienen el inconveniente de que existe un riesgo de que se vuelvan a cerrar (lo que se conoce como restenosis). Sumado a que durante un mes es necesario administrar conjuntamente dos fármacos antiagregantes plaquetarios para evitar que el stent se coagule.

Luego están los stents liberadores de fármacos, que algunos pueden estar recubiertos con fármacos antiproliferativos. Este lo que hace es proporcionar el mismo soporte estructural que los stents convencionales: libera lentamente un fármaco que ayuda a su vez a impedir que las arterias se vuelvan a cerrar. Suelen ser más caros que los convencionales y requieren tratamiento con dos antiagregantes plaquetarios durante un tiempo más prolongado.

Recordamos que a fines de agosto la conductora, de 94 años de edad, volvió a su programa del sábado a la noche para suplir a Juana Viale, su nieta, quien concuce en los últimos tiempos. En esa oportunidad comentó que estuvo 300 días sin salir al balcón siquiera, lo que no le había hecho bien, según sus propias palabras.

Textual

“Acá estoy. Con un poco de nervios porque hace un año y medio que no hago televisión ”, dijo en su ingreso y agradeció el cariño recibido a lo largo de toda su ausencia televisiva. “300 días sin salir de mi casa ni al balcón. Eso te altera, no te hace bien ”, comentó la diva que se preocupó por su situación anímica y le consultó a un especialista.

“Soy una señora muy mayor, pero soy vital, me gusta disfrutar la vida. Estaba tan mal que llamé a un neurólogo y le dije que quería volver a ser la de antes. ¿Saben qué me dijo? 'Trabaje'. Así que aquí estoy, es la mejor terapia ”, concluyó.