Pasaron poco más de once años cuando, en plena terminal de Río Cuarto, una complicación de salud terminó con su vida. Esa que recorrió de un modo pleno y natural, muy lejos de la abundancia.

Alejandro “Bocha” Sokol lleva más de una década sin contagiar con su personalidad a quien se cruzara en su camino. De muy joven fue integrante de la primera formación de Sumo, cuando Luca Prodan derivó en las sierras de Córdoba de la mano de su amigo Timmy MacKern.

Después, le puso su alma a Las Pelotas, que condujo a la masividad junto a Germán Daffunchio. Ya en sus últimos años, conformó “El vuelto” junto a su hijo Ismael, quien sigue girando con el nombre del grupo.

Para recordarlo, como bien cabe cada 12 de enero, en el aniversario de su fallecimiento, compartimos el documental “Sólo”, que construyeron hace unos años el fotógrafo Andrés Kevorkian y el periodista especializado en rock, Bruno Larocca.

En ocasión de la fecha, en Córdoba fue Jorge Kasparián, un entrañable amigo, quien lo recordó con una particular anécdota.