El diputado Héctor Olivares continúa en estado grave, internado en el Hospital Ramos Mejía, después de ser baleado el jueves a las siete de la mañana en cercanías al Congreso de la Nación.

El legislador fue sometido a una cirugía debido a la herida de bala que lesionó si hígado, colon y páncreas.

El subdirector del hospital Ramos Mejía, Pablo Rossini, informó que Olivares cursa " el primer día posterior a su cirugía" y que "gracias al esfuerzo de los médicos se pudo mantener una presión arterial adecuada".

Asimismo también dijo que podría realizarse una nueva cirugía después de concluir con una hemodiálisis para eliminar el exceso de líquido que compromete la función renal.

"Sigue grave, su estado es crítico, con riesgo de vida", agregó Rossini al aclarar que necesitan donantes de sangre de cualquier grupo y factor. Los voluntarios pueden dirigirse a los hospitales del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

El subdirector del hospital explicó que Olivares se "está mantenido estable con las drogas que esta recibiendo" y que "su vida depende del soporte vital en terapia intensiva". "Está en asistencia respiratoria mecánica y la función hemodinámica está reemplazada por las drogas vasoactivas que está recibiendo", concluyó.

Por los disparos que causaron la muerte de Miguel Yadón, asesor de Olivares, e hirieron de gravedad al legislador riojano fueron detenidas seis personas. La principal hipótesis apunta a motivaciones de índole persona.