El activista y exembajador ante la ONU, Pablo Solón, repasó en Radio Universidad de Córdoba la responsabilidad del presidente Evo Morales ante los incendios.

El análisis del exfuncionario marca que el gobierno boliviano durante su primer periodo, que inició en 2005, tenía una clara política contra los biocombustibles, trangénicos y la agroidustria. Pero desde 2009, en el segundo período de Morales, las políticas cambiaron frente al sector de los agronegocios. Se flexibilizó el uso de los transgénicos, se aprobaron reglas para ampliar la cantidad de hectáreas para desmontes y se disminuyó las multas por deforestación ilegal. Llegando a la irrisorio monto de 46 dólares por hectárea.

Según Solón todas éstas políticas favorecieron al aumento de los incendios en la zona. En contraparte, reforestar una hectárea en Bolivia tiene un costo de $1000 dólares y tarda hasta 200 años para recuperar la biodiversidad. “se quemaron 2 millones de hectáreas con 200 millones de animales. Ésto es un holocausto” acusó el activista boliviano.