“Almeyda tenía cuatro amarillas y pegó una patada que era para amonestarlo. Cobré la falta, pero me hice el boludo, porque si le sacaba la tarjeta se iba a perder el primer partido de la Promoción con Belgrano”, rememoró.

A su vez, diferenció el trato que tenía con jugadores históricos de otros futbolistas: “Hay jugadores como Ortega, Verón o Riquelme que merecen tener un diálogo más. Hoy debe pasar con Izquierdoz, Tévez o Ponzio.  Carlos Tévez es una institución para Boca, como Ponzio para nosotros”.

Finalmente, justificó su decisión de revelar de que equipo es hincha: “¿Qué árbitro de fútbol no es hincha de un equipo? Si alguna vez pateaste una pelota, tenés que ser hincha de alguien. Te tiene que gustar el fútbol”.

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