Venecia subasta Tessera, uno de sus islotes con una ubicación más que atractiva: a un paseo en góndola de la maravillosa plaza de San Marcos. El terreno, 4.100 metros cuadrados, bañado por las aguas de la laguna veneciana, y antigua base militar, iba a ser la sede de un idílico complejo hotelero de lujo que nunca llegó a levantarse. En la actualidad se busca un comprador dispuesto a pagar al menos 2,2 millones de euros (unos 2,5 millones de dólares), su precio de salida.

La isla comprende una residencia principal de una planta, de 165 metros cuadrados, deshabitada en la actualidad y una serie de edificios aledaños más pequeños, como un almacén o una cabaña de invitados de 70 metros cuadrados, que se encuentran en un estado de conservación que el ayuntamiento en sus planos califica como “medianamente bueno”. También tiene un amplio jardín con algunos árboles frutales y una antigua viña.

No es la primera vez que este islote está a la venta. Ya se trató de subastar en julio, por 3,2 millones de euros, pero en esa ocasión nadie pujó por la propiedad y ahora vuelve a estar en el mercado, con una rebaja de un millón de euros. En rara ocasión las islas de la laguna de Venecia –son más de 100 en total entre las mayores y las menores– salen a la venta a subasta y menos, con un descuento tan significativo.

En 2012, el constructor veneciano Lorenzo Marinese, propietario de esta pequeña isla de la laguna, que además está muy próxima del aeropuerto Marco Polo, proyectó la construcción de un complejo hotelero de lujo con una veintena de habitaciones, un embarcadero privado y todo tipo de atracciones para los amantes de los deportes náuticos. El plan se quedó en papel mojado cuando la promotora de Marinese entró en quiebra un par de años después y desde entonces el islote quedó en estado de abandono.

La isla de Tessera ha tenido en el pasado otros dueños ilustres. Uno de ellos fue Edward De Bono, el prolífico escritor y psicólogo maltés conocido como el gurú del llamado “pensamiento lateral”, que estudia la eficacia en la toma de decisiones y la resolución de problemas. El estudioso aprovechaba la tranquilidad que ofrece el entorno y utilizaba el islote como base para las reuniones y los seminarios que celebraba en Italia. La vendió en 2007 por 4 millones de euros, dos millones menos de lo que pedía cuando la puso a la venta varios años antes.

En el pasado, el islote, a medio camino entre el actual aeropuerto de Venecia y la isla de Murano, famosa por sus cristales artísticos, sirvió como base militar para los franceses primero, durante la ocupación napoleónica; para Austria más tarde durante la dominación austriaca y para los italianos finalmente, antes de pasar a manos privadas.

Se trata de una de las muchas y pequeñas islas artificiales, bastante similares entre sí, que salpican la laguna y rodean Venecia, levantadas con el objetivo de defender a la isla mayor de los ataques procedentes de tierra firme.

Un informe del Centro de Estudios de la inmobiliaria Sogeea ha revelado que cada vez son más los bienes inmobiliarios que se subastan en Italia. Muchos de ellos son castillos, como el de Ozegna, en la provincia de Turín y que data del siglo IV; grandes villas como la Odescalchi, en Como, construida en el siglo XVII y que fue residencia del Papa Inocencio XI; casos particulares como el de esta isla o incluso tres históricas salas de cine de la capital.