Es casi imposible practicar el "distanciamiento social" con las personas con quienes compartimos hogares y camas. ¿Pero cuáles son los riesgos asociados con la intimidad en tiempos de coronavirus? El periódico The Guardian, pidió opinión a tres expertos internacionales sobre las dudas más frecuentes sobre el tema. Aquí nuestra traducción.

¿El nuevo virus CoV-2 (normalmente llamado Covid -19) es sexualmente transmisible?
Dra. Jessica Justman: No estamos viendo patrones que indiquen la transmisión sexual. Se propaga principalmente a través de gotitas respiratorias. Y se considera que tocar superficies contaminadas es el modo secundario de transmisión.
Dr. Carlos Rodríguez-Díaz: No hay evidencia de que este virus se pueda transmitir por vía vaginal o anal. Sin embargo, besarse es una práctica muy común durante las relaciones sexuales, y el virus puede transmitirse a través de la saliva. Por lo tanto, el virus puede transmitirse besándose. También hay evidencia de transmisión oral-fecal del Covid-19 y eso implica que el analingus puede representar un riesgo de infección.

Entonces, ¿es seguro tener sexo?
Justman: Si usted o su pareja es un caso positivo de CoV-2, el consejo es mantenerse lo más distante posible. De hecho, el departamento de salud de la ciudad de Nueva York tiene pautas al respecto. Si es un caso posible o confirmado, debe aislarse, idealmente en una residencia privada hasta siete días después de que se manifestó la enfermedad. No debe haber tenido fiebre durante 72 horas, sin usar ibuprofeno ni nada que pueda enmascarar su fiebre, y sus síntomas respiratorios deberían estar mejorando, antes de suspender el aislamiento.
Dra. Julia Marcus: Pero para las personas que no tienen síntomas y no tienen una exposición probable reciente y se han quedado cerca de casa, creo que, si está dentro de su propio hogar, es una historia diferente. Si se convive con una pareja sexual regular y no hay ningún síntoma, o exposición probable, el sexo podría ser realmente una excelente forma de divertirse, mantenerse conectado y aliviar la ansiedad durante este tiempo potencialmente estresante.

¿Qué pasa con los nuevos contactos?
Marcus: La recomendación en este momento es que tratemos de quedarnos en casa tanto como podamos y que realmente solo tengamos contacto con las personas para cosas que son esenciales, como los comestibles. E incluso cuando hacemos estas actividades, debe mantenerse una distancia física de aproximadamente 1,5 metros de otras personas. Eso definitivamente haría que el sexo sea un desafío.
Rodríguez-Díaz: Las relaciones sexuales pueden disminuir durante las próximas semanas, pero otras formas de expresar el erotismo, como el sexting, las videollamadas, la lectura erótica y la masturbación seguirán siendo opciones.

¿Qué higiene debe aplicarse a los juguetes sexuales?
Rodríguez-Díaz: Solo usar agua y jabón.

En vista de la incertidumbre sobre la duración de la pandemia  ¿Qué recomendaciones son válidas para personas  que no quieren esperar meses antes de poder tener una relación íntima con alguien?
Rodríguez-Díaz: Si te preocupa practicar el distanciamiento social durante demasiado tiempo, asegúrate de que tú y las personas que conoces practiquen el distanciamiento social ahora. Cuanto antes lo hagamos, antes veremos una disminución de las nuevas infecciones, y antes podremos cambiar nuestra práctica de socializar. En lugar de centrarnos en el futuro, debemos centrarnos en el presente.
Usa estas dos semanas para canalizar tu energía, explorarte a ti mismo, quizás pensar en lo que estás buscando. Y puedes hacerlo tú solo. Puede ser una gran oportunidad para explorar otras formas de relacionarse con nuevas parejas sexuales que puede conocer en línea enviando mensajes de texto o usando videollamadas.

Expertos:
La Dra. Jessica Justman es profesora y médica asistente en la División de Enfermedades Infecciosas del Centro Médico Irving de la Universidad de Columbia.
El Dr. Carlos E Rodríguez-Díaz es profesor en la Escuela de Salud Pública del Instituto Milken de la Universidad George Washington.
La Dra. Julia Marcus es epidemióloga de enfermedades infecciosas y profesora en el Departamento de Medicina de Población de la Facultad de Medicina de Harvard.