El candidato demócrata Joe Biden alcanzó dos triunfos críticos en dos estados del norte de Estados Unidos, Winconsin (10 electores) y Michigan (16 electores). De esta manera, suma 264 electores de los 270 necesarios para ganar las elecciones, según informaron medios internacionales. 

Ante este escenario, el candidato republicano, Donald Trump, anticipó que pedirá un recuento de votos en Winconsin, donde su oponente le sacó una ventaja de más de 20 mil votos. 

El candidato demócrata Joe Biden lidera el escrutinio y el presidente Trump trata de instalar la idea del fraude electoral. Además, pidió la suspensión del conteo en el estado de Michigan, donde su rival logró revertir la tendencia y se impuso por 15 mil votos. Si se consolida en ese estado y mantiene la elección que está haciendo en Arizona y Nevada, Biden alcanzará los números para conseguir la victoria sobre Trump. 

Por otro lado, a pesar de liderar en Pensilvania por más de 300 mil votos, el equipo de campaña de Trump pide a la Corte que intervenga en el escrutinio. 

La demora en la carga de votos anticipa una incertidumbre que se prolongará por varias horas, o días, y que estará acompañada por polémica y sujeta a definiciones judiciales.

 "No declaro que ganamos, pero sí que cuando termine el conteo seremos los ganadores", dijo el exvicepresidente de Barack Obama. En la otra vereda, Trump insiste: "Hemos reclamado, a los efectos del voto electoral, el Commonwealth de Pennsylvania (que no permite observadores legales), el Estado de Georgia y el Estado de Carolina del Norte, cada uno de los cuales tiene una gran ventaja de Trump".