Biden quiere aumentar impuestos a los ricos para financiar ayuda social y educación
En su primer discurso frente al Congreso, el presidente estadounidense expondrá su plan en el que prevé mayores gravámenes para los sectores más acomodados de la sociedad.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden propondrá un aumento de la tasa impositiva máxima del 37 al 39,6 por ciento, destinada al 1 por ciento más rico y la tasa de ganancias de capital pagada en activos como acciones, bonos y dividendos al 39,6 por ciento, que afecta al 0,3 por ciento de la población, para financiar programas de asistencia social y educativos.
En su primer discurso frente al Congreso, el mandatario desplegará los detalles de su propuesta para intentar dar cumplimiento a parte de sus promesas de campaña, que lo llevaron al triunfo en las últimas elecciones.
El producto de lo recaudado por esas vías, será destinado a financiar programas para ampliar drásticamente programas de educación y redes de seguridad social para las familias norteamericanas.
En ese sentido, la propuesta proporcionaría a cada estadounidense dos años de universidad comunitaria sin matrícula; pre jardín para todos los de 3 y 4 años; y licencia familiar y médica pagada para los trabajadores estadounidenses.
La iniciativa de Biden para el ingreso a las universidades comunitarias, consiste en subsidiar la matrícula para estudiantes de familias que ganan menos de 125,000 dólares anuales, inscriptos en instituciones históricamente negras, universidades tribales y otras instituciones que sirven a minorías durante dos años, lo que supone una inversión de 109 mil millones de dólares.
Por otra parte, el programa también prevé incrementar el crédito fiscal otorgado por niño, de 2 mil hasta los 3600 dólares, dependiendo de la edad, lo que implicaría casi duplicar esa asistencia estatal.
Desde la Casa Blanca justifican las medidas al señalar que "es una inversión en nuestros hijos y nuestras familias, ayudando a las familias a cubrir los gastos básicos con los que tantos luchan ahora, reduciendo las primas de seguro de salud y continuando con las reducciones históricas del Plan de Rescate Estadounidense en la pobreza infantil".
De todos modos, la iniciativa necesita de la aprobación del Congreso norteamericano, y las dudas están puestas en el apoyo que puedan brindar los representantes republicanos y los sectores más conservadores.