El presidente Jair Bolsonaro saludó a los partidarios de su gobierno este domingo que se congregaron frente al Palacio de Planalto contradiciendo las pautas para contener la epidemia de coronavirus; incluso montando a caballo. 
Bolsonaro tomó parte de una exhibición de vuelo con helicópteros y luego descendió a la explanda en dónde una multitud se agolpó para saludarlo. Nuevamente, abrazó a seguidores que llevaban banderas y tomó en brazos a niños sin máscara.
Después de caminar de un extremo a otro de la Praça dos Três Poderes, Bolsonaro decidió montar el caballo de uno de los policías que vigilaba la manifestación, llegando a galopar en medio de su cabalgata.
Luego regresó al helicóptero en el que retornaría a la residencia oficial, el Palácio da Alvorada.

En medio del alaramante crecimiento de casos (Brasil ya supera el medio millón de contagios y es el cuarto país del mundo en fallecidos) y una crisis política y económica sin precedentes se polariza la sociedad y se desarrollaron manifestaciones a favor y en contra de Bolsonaro.
En São Paulo, el epicentro de la pandemia de Covid-19 en el país,  hubo enfrentamientos y la Policía Militar se activó en la Avenida Paulista, pero también en Río y Belo Horizonte.