Todos los usuarios de teléfonos móviles en China que registran nuevas tarjetas SIM deben someterse a escaneos de reconocimiento facial, de acuerdo con una nueva regla que entró en vigencia en todo el país el domingo.

Las normas requieren que las compañías de telecomunicaciones implementen "inteligencia artificial y otros métodos técnicos" para verificar las identidades de las personas que registran las tarjetas SIM. Todas las tiendas físicas del país tuvieron hasta el 1 de diciembre para comenzar a implementar los nuevos estándares de seguridad.

La medida, descrita por el Ministerio de Industria e Información como una forma de "proteger los derechos e intereses legítimos de los ciudadanos en el ciberespacio", hace que los usuarios chinos de teléfonos móviles e Internet sean más fáciles de rastrear.

Ya se requería que los usuarios de teléfonos móviles registren las tarjetas SIM con sus tarjetas de identidad o pasaportes y muchas telecomunicaciones comenzaron a escanear las caras de los clientes desde el año pasado. Muchas plataformas de redes sociales también solicitan que los usuarios se registren con sus "identidades de nombre real" a través de sus números de teléfono.

En noviembre, un profesor presentó lo que se cree que es la primera demanda del país contra el uso del reconocimiento facial. Guo Bing, profesor de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Zhejiang, alegó que un parque de entretenimientos en Beijing violó la ley de protección de los derechos del consumidor del país al escanear su rostro y tomar sus datos personales sin su consentimiento.

El Ministerio de Educación de China dijo en septiembre que "frenaría y regularía" el uso del reconocimiento facial después de que los padres se enojaron cuando se instaló un software de reconocimiento facial sin su conocimiento en una universidad en Nanjing para monitorear la asistencia de los estudiantes durante la clase.

Los expertos también advierten que China carece de regulación sobre cómo se puede utilizar el reconocimiento facial. Más de dos docenas de compañías tecnológicas chinas han comenzado a redactar estándares nacionales para la industria.

Los defensores de los derechos humanos describieron la medida como un paso más hacia el "estado de vigilancia distópica", en el que las ciudades chinas serán vigilados como anticipaba la célebre novela “1984” de George Orwell.

El ministerio ha dicho que la norma protegerá a los ciudadanos de estafas telefónicas y evitará la reventa de tarjetas SIM como parte de las campañas de ciberseguridad y antiterrorismo.

China tiene el liderazgo mundial en el uso de cámaras como parte de la seguridad. La estadística muestra que 8 de las 10 ciudades del mundo con más cámaras por habitante son Chinas, entre ellas Chongqing la ciudad del mundo con más cámaras por habitante (con 168 cámaras cada 1000 personas) y Shanghai, la ciudad del mundo con más cámaras instaladas, que dispone de más de tres millones de cámaras operando.

Pero la tendencia está presente también en occidente: Londres y Atlanta están sexta y décima en el selecto ranking de las ciudades con más cámaras por habitante del mundo.