Cuba comenzará su reforma monetaria el próximo primero de enero y por primera vez desde 1959 habrá una devaluación. Según anunció el presidente de ese país, Miguel Díaz-Canel, se unificarán el peso cubano (CUP) y el peso convertible (CUC).

La iniciativa prevé que el CUC sea eliminado luego de 180 días y que el CUP maneje un tipo de cambio de US$24. Esta reforma busca buscarle una solución a la crisis económica que atraviesa ese país producto de la pandemia.

"Esta reforma pondrá al país en mejores condiciones para llevar a cabo la transformaciones que demanda la actualización de nuestro modelo económico y social", expresó Díaz-Canel. Sin embargo, aclaró que no se trata de una "solución mágica".

Esta decisión significará un rotundo cambio para Cuba, que podría sufrir un impacto inflacionario y la pérdida de varias empresas estatales. En el mismo anuncio, el presidente informó que se aumentarán los salarios estatales y las pensiones.

"La tarea no está exenta de riesgos", admitió el mandatario, quien además afirmó que se harán severos controles para evitar los precios abusivos y especulativos.