Tras 12 días de protestas en todo el país en rechazo a las políticas del Gobierno, este domingo por la tarde, autoridades colombianas anunciaron que se inició un acercamiento con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) con el objetivo de verificar si existe una verdadera voluntad de paz.

En una declaración difundida por su despacho y recogida por la agencia de noticias Sputnik, el alto Comisionado de Paz, Miguel Ceballos, manifestó: "La Santa Sede y las Naciones Unidas, que representan el más alto nivel ético y político en el mundo, adelantaron las distintas actividades y acciones sin que ninguna de ellas implicare un diálogo directo entre miembros del ELN y el Gobierno Nacional".

Según Ceballos, el sacerdote Darío Echeverri, en representación de la Santa Sede, y Carlos Ruíz Massieu, en nombre del secretario General de las Naciones Unidas en Colombia, participaron con el respaldo del Gobierno colombiano en 28 reuniones de exploración, cuatro de ellas en La Habana, para indagar la posibilidad de diálogo con el grupo rebelde.

El objetivo, agregó, es "construir una arquitectura para un eventual espacio de diálogo, después el cumplimiento de las condiciones establecidas por el Gobierno Nacional".

"Hasta la fecha el ELN no ha avanzado en las decisiones necesarias que hagan posible un espacio de diálogo, al negarse a cumplir las condiciones establecidas por el presidente Iván Duque", finalizó el Comisionado de Paz.

El Gobierno colombiano ha señalado que sólo retomará los diálogos de paz con el ELN cuando ese grupo rebelde entregue a las personas que mantiene secuestradas, cese los ataques a la infraestructura del país y plantee una voluntad de concentrarse para iniciar un proceso de desmovilización y dejación de armas.

Fuente: Télam.