El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este lunes que Irán "nunca tendrá un arma nuclear", luego de que el país islámico anunciara que suspendería los compromisos para reducir su producción nuclear.

¡Irán nunca tendrá un arma nuclear!", escribió Trump para responder la decisión del Consejo de Seguridad Nacional iraní que ayer anunció que “la República Islámica de Irán pondrá fin a sus limitaciones finales en el acuerdo nuclear”.

"El programa nuclear de Irán eliminará todas las restricciones de su producción de uranio,
incluyendo el porcentaje de enriquecimiento y la cantidad de uranio enriquecido, así como las limitaciones a su investigación y desarrollo”, precisó la misiva de Teherán.

En 2015, Irán, Rusia, China, Francia, Alemania, Reino Unido y Estados Unidos firmaron un pacto para que toda la actividad nuclear iraní esté bajo la supervisión del Organismo Internacional de Energía Atómica.

Sin embargo, en 2018, Trump resolvió unilateralmente abandonar el JCPOA (como se denomina el pacto por su siglas en inglés) y reactivó las sanciones económicas contra Teherán.

Hasta el momento, Irán buscaba la intervención de los países europeos para suspender las sanciones y, en paralelo, anunció, al cumplirse un año de la salida de Estados Unidos, la reducción de sus compromisos.

Irán abandona el acuerdo nuclear tras el asesinato de Qassem Solemani

El presidente iraní, Hassan Rohani, había advertido el pasado sábado que el país norteamericano sería testigo de "las consecuencias" del asesinato del comandante Soleimani de la Guardia Revolucionaria cometido el jueves 2 de enero.

"Los estadounidenses no se dieron cuenta del gran error que cometieron (...) Sin duda Estados Unidos es hoy mucho más odiado (que antes) entre la gente de Irán e Irak", dijo Rohani durante una reunión con la familia del comandante asesinado.

En paralelo, una multitud despide este lunes en Teherán a Soleimani entre llantos, gritos de "ni mediación ni rendición" y promesas de venganza difundidas a todo volumen por parlantes. Cientos de miles de personas -millones, según las autoridades- al comandante más poderoso de Irán, en un funeral que recuerda al del ayatolá y fundador de la República Islámica, Ruhollah Jomeini.