La decisión fue anunciada pasadas las 21:30, hora local.
Luego de 12 días de movilizaciones el Gobierno y el sector indígena finalmente llegaron a un acuerdo: dejar sin efecto el Decreto 883, que eliminaba el subsidio a los combustibles, que fue el detonante de las protestas.

Para este fin se instala una comisión que elaborará un nuevo decreto, integrado por los movimientos indígenas y el Gobierno Nacional, con la mediación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Conferencia Episcopal Ecuatoriana.

El documento fue leído por el coordinador residente del Sistema de Naciones Unidas en Ecuador, Arnaud Peral, quien actuó como moderador. Con este acuerdo, virtualmente las protestas y movilizaciones llegaron a su fin, con el compromiso de que se restablezca la paz en el país.

El documento fue producto de los diálogos entre Gobierno e indígenas, que tenían previsto realizarse a las 15:00, pero que finalmente se instalaron a las 17:58, en el Centro de Espiritualidad San Patricio, en las afueras de Quito. En el inicio de las conversaciones, el presidente de la República, Lenín Moreno, propuso la creación de una comisión para trabajar en la elaboración de un nuevo decreto.
El presidente Moreno insistió con sus tesis sobre la intencionalidad política: “No es casualidad nada de esto. Acá hay dinero del narcotráfico. No es posible que no haya sido bien interpretada nuestra intención”.

Por la dirigencia indígena intervinieron Jaime Vargas, titular de la Conaie; Leonidas Iza, del Movimiento Indígena de Cotopaxi; Abelardo Granda, de la Fenocín; Amelia Cisneros, entre otros. Luego de que se leyó el acuerdo, Vargas pidió, además, la renuncia de la ministra María Paula Romo y el de Defensa, Oswaldo Jarrín.

Por su parte, el secretario particular de la Presidencia, Juan Sebastián Roldán, también abogó por la paz. “Pero los que secuestraron se tienen que ir a la cárcel, los que robaron se tienen que ir a la cárcel. Es el momento de la paz y esa paz se construye con acciones concretas”. El acuerdo se logró luego de un receso que en principio debió durar 15 minutos, pero se extendió por más de una hora. En otra sala, al menos 30 personas que no pudieron ingresar a la mesa de diálogo se sentaron frente a un proyector y seguían las negociaciones.

En cualquier caso, más allá del acuerdo, todavía hoy no habrá clases en todo el país ni se ha levantado el toque de queda. En Quito, aunque se haya anulado el aumento de los combustibles, el boleto de transporte público sostendrá el aumento a 35 centavos de dólar.

La cifra provisoria de víctimas de la represión es por ahora de siete personas y miles de heridos. No se conocen cifras definitivas sobre detenidos.