En Estados Unidos, más de 1200 personas murieron por complicaciones de coronavirus en el último día, según dijo la Universidad Johns Hopkins el domingo por la noche.

La universidad que mantiene un recuento de las cifras mundiales de coronavirus, comunicó que hay al menos 337.072 infectados confirmados en Estados Unidos y 9.633 muertes.

Por otra parte, el estado de Nueva York, el epicentro del COVID-19 en Estados Unidos y a nivel mundial, anunció este domingo que el coronavirus ya causó 4.159 muertes y 122.031 contagios, mientras las autoridades advertían de que esta semana el país vivirá un “momento como el de Pearl Harbor, como el del 11-S”.

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, que el sábado aseguraba que el pico de contagios en Nueva York llegaría en los próximos siete días, declaró que el estado podría haber llegado ya al momento más elevado de los contagios, aunque advirtió de que en vez de una reducción de las muertes y los casos, lo que se podría producir es una “plataforma” con un periodo registrándose cifras elevadas de muertos.

El número de casos confirmados en Estados Unidos supera los 318.000 y el de muertos los 9.000, con Nueva York a la cabeza (con 122.031 contagiados y 4.159 muertos), seguido de Nueva Jersey (34.124 contagiados y 847 muertes), Michigan (14.225 contagiados y 540 muertos), California (13.796 contagiados y 323 muertos) y Louisiana (12.496 contagiados y 412 muertos), según los datos aportados por Cuomo.

Por su parte Donald Trump, en una rueda de prensa a última hora de la tarde volvió a expresar su voluntad de que el país vuelva a la normalidad cuanto antes y aseguró que ya ve “la luz al final del túnel”.

Trump explicó que para el martes habrán llegado unos 3.000 militares médicos y enfermeras a Nueva York y sus alrededores, y que se está acelerando el envío de respiradores a Nueva Jersey, Illinois o Luisiana.