El papa Francisco visita este lunes un cementerio indígena en Maskwacis, Canadá, en el marco de una gira por 10 días para pedir perdón por los internados indígenas.

El Sumo Pontífice visitó el lugar junto a sobrevivientes de los internados estatales. También se reunió con los pueblos First Nations, Métis e Inuit en la Iglesia de Nuestra Señora de los Siete Dolores, en la localidad ubicada unos 100 kilómetros al Sur de Edmonton.

Con el lema "Caminando juntos", el pontífice inició en el país norteamericano una "peregrinación penitencial".

Entre 1883 hasta 1996,  unos 150 mil niños indígenas ingresaron de manera forzosa a internados con el objetivo de "occidentalizarlos". Durante su estadía, los internados sufrieron la falta de higiene y condiciones de salud, agravadas por el frío y la alimentación insuficiente.

Además, hubo denuncias por abusos físicos, psicológicos y sexuales que se registraron. Los pueblos indígenas canadienses sostienen que entre 4.000 y 6.100 niños murieron en los internados.

Estas "escuelas residenciales indígenas" eran financiadas por el Gobierno de Canadá y administrada por varias iglesias cristianas, entre ellas, la Iglesia Católica.