El plan de Inglaterra de levantar todas las restricciones por Covid-19 el 21 de junio se ha visto frustrado por la variante delta del virus, dijo el primer ministro Boris Johnson.

A pesar del éxito del despliegue de la vacuna en el Reino Unido, que ha administrado dos dosis a más de la mitad de la población adulta, la prevalencia de la variante delta, identificada por primera vez en la India, ha convencido al primer ministro y a su gobierno de que el "día de la libertad" para los ciudadanos ingleses, como algunos lo han llamado, debe retrasarse cuatro semanas, hasta el 19 de julio.

"Ahora es el momento de soltar el acelerador, porque si somos precavidos ahora, tenemos la oportunidad en las próximas cuatro semanas de salvar muchos miles de vidas vacunando a millones de personas más", dijo Johnson en una rueda de prensa en Downing Street.

La variante está creciendo en el Reino Unido a un ritmo del 7% semana a semana y el gobierno teme que si las restricciones se levantan por completo el próximo lunes, entonces las hospitalizaciones podrían aumentar a los niveles registrados en la primera ola del país.

El intervalo de cuatro semanas permitirá al gobierno acelerar la administración de la segunda vacuna a los más vulnerables.

"La vacunación reduce en gran medida la transmisión y dos dosis proporcionan un nivel muy alto de protección contra la enfermedad grave y la muerte, pero todavía hay millones de adultos jóvenes que no han sido vacunados y, lamentablemente, una proporción de los ancianos y personas vulnerables todavía puede sucumbir incluso si han recibido dos vacunas", dijo Johnson.

La Oficina de Salud Pública de Inglaterra (PHE, por sus siglas en inglés) informó el lunes que las dos principales vacunas utilizadas en el Reino Unido son muy eficaces contra la variante.

PHE afirma que la vacuna contra el covid-19 de Oxford/AstraZeneca es un 92% efectiva contra la variante después de dos dosis, mientras que la de Pfizer-BioNTech ofrece un 96% de protección después de dos dosis. Su investigación ha descubierto que, aunque una dosis es un 17% menos eficaz para proteger a las personas de la variante delta en comparación con la variante alfa, la diferencia es mucho menor después de dos.

Esto significa que el Reino Unido se encuentra en una carrera contrarreloj para conseguir aplicar las dosis en las próximas cuatro semanas.

El gobierno cree que lo conseguirá reduciendo el intervalo entre las dosis de 12 semanas a ocho para los mayores de 40 años. A todos los mayores de 40 años que recibieron una dosis a mediados de mayo se les ofrecerá una segunda antes del 19 de julio, mientras que a todos los mayores de 18 años se les habrá ofrecido su primera vacuna para esa fecha.

Fuente: CNN.