La tormenta perfecta estalló en el sector del turismo. Tras cerrar el mes de julio con una ocupación media del 40% y con una reactivación de las reservas, especialmente de turistas locales, los rebrotes en agosto y el veto a viajar de los grandes mercados emisores, como Reino Unido, cuya prohibición expira el 17 de agosto, obligaron a las hoteleras a activar el plan b, con una agresiva rebaja en los precios.

Las ofertas que están realizando las cuatro grandes hoteleras en España (Meliá, NH, Iberostar y RIU) a través de sus páginas webs corroboran esa estrategia de salvar el peor agosto de la historia y evitar cerrar los hoteles que ya están abiertos.

La mayor rebaja de precios la realiza RIU, con una venta de última hora con descuentos del 40% para viajes contratados antes del jueves 13 de agosto. La oferta es para plazas disponibles entre esa fecha y el 31 de octubre de 2020 e incluye también una flexibilización inédita en la venta de viajes, con cancelación gratuita de la reserva y un servicio de asistencia médico gratuito. Fuentes de la hotelera recalcan que de los 99 establecimientos que tiene en cartera, hay un tercio que están cerrados y que la actividad comercial se está centrando en tratar de reemplazar a los turistas británicos por viajeros de otras nacionalidades en Andalucía y Canarias, mientras que en Baleares la afluencia de alemanes es menor que la de otros años, pero está dentro de lo previsto. “Lo que más valoran en la actualidad es la sensación de seguridad frente al ocio que reclamaban en otros años”.

Meliá, la mayor hotelera de España, con más de 380 establecimientos, fue la primera que abrió la puerta a la rebaja de precios y lleva desde principios de junio con descuentos del 30% sobre tarifas oficiales, aunque esta promoción se acaba el próximo 25 de agosto. Fuentes de la compañía no descartan que la campaña pueda ampliarse en función de cómo avancen los indicadores de ocupación. La oferta incluye cancelación gratuita, salida tardía del hotel y niños gratis. Entre enero y junio, Meliá registró unas pérdidas de 358 millones, en lo que ha sido considerado el peor semestre de su historia.

¿Alcanzarán algunos argentinos a aprovechar estos descuentos?