Por estas horas, Perú registra más de 27 mil personas fallecidas por coronavirus y despertará mañana con más de 600 mil contagios. Pero esas cifras, que lo ubican como uno de los países más afectados el mundo, no bastan para generar conciencia sobre la magnitud del problema.

El domingo por la noche, durante un procedimiento para impedir el desarrollo de una reunión en una discoteca de Lima, fallecieron 13 personas en confusas circunstancias. El ministro del Interior de Perú, Jorge Montoya, explicó cómo se habría desatado el caos en la discoteca Thomas Restobar  de Lima, durante una intervención de la Policía Nacional para hacer cumplir la prohibición de fiestas y reuniones durante el estado de emergencia por la pandemia del coronavirus (COVID-19).

En diálogo con la prensa, el integrante del gabinete ministerial señaló que fue un vecino el que alertó a un grupo de 13 agentes que realizaba patrullaje por la zona de Los Olivos sobre el desarrollo de una fiesta con la presencia de 30 personas.
Los policías ingresaron al local pero encontraron a unas 120 personas. Luego, siempre según la versión oficial, se identificaron y procedieron a pedir a los hombres a voltearse y mirar contra la pared para revisarlos. Fue en esas circunstancias que las mujeres se “agazaparon” y comenzaron a escapar por la escalera.
Eso fue aprovechado por los sujetos intervenidos para lanzar botellas contra los agentes y bajar por la escalera, aplastando a las mujeres que en ese momento se encontraban cerca de la puerta. Incluso, un agente fue aplastado por la turba y se cerró la puerta.

A los pocos minutos llegó personal del Escuadrón Verde y abrió, desde el exterior, la puerta. Los hombres intervenidos salieron del inmueble, “pisotearon a las personas” y huyeron. Por ello, a pesar de la insistencia del Ministro del Interior no parece claro que los agentes de la Policía Nacional hayan cumplido con “todos los protocolos” durante la intervención a la discoteca Thomas Restobar.
De hecho, testigos del hecho señalaron que se habrían usado gases lacrimógenos durante el operativo.

“Nosotros hemos cumplido con todos los protocolos establecidos para las intervenciones en diferentes locales de acuerdo con la normatividad con la que cuenta la Policía Nacional, seguiremos haciéndolo y, cuando sea necesario, realizaremos todas las investigaciones correspondientes”, afirmó Montoya.
Poco después del operativo el comandante general de la Policía Nacional del Perú, Orlando Velasco, confirmó que de los 23 detenidos en la discoteca Thomas en Los Olivos, 15 dieron  positivo de coronavirus y 3 contaban con antecedentes penales.