En la madrugada de este martes falleció sor André, una monja francesa que tenía 118 años de edad. Era la persona más longeva del mundo de la que haya registro.

Vivía en una residencia para ancianos de Toulon. Según informó la agencia de noticias AFP, el deceso ocurrió a las 2 de la mañana mientras dormía.

La mujer había nacido el 11 de febrero de 1904 en la ciudad meridional francesa de Alès. Había tomado los hábitos a la edad de 41 años.

Era reconocida por los famosos Récords Guiness, que le dieron el rango luego de que en abril de 2022 falleciera la japonesa Kane Tanaka, quien en ese entonces tenía 119 años.