Volkswagen, uno de los gigantes alemanes de la industria automotriz, decidió sumarse a los esfuerzos para solucionar los problemas de movilidad que enfrentan las grandes ciudades y presentó un llamativo vehículo eléctrico que parece combinar partes de una bicicleta convencional con un monopatín eléctrico.

El vehículo fue llamado Streetmate y ha sido calificado como un transporte urbano de diseño simple pero con grandes prestaciones. A simple vista, la nueva propuesta alemana se diferencia rápidamente de los ya conocidos vehículos personales de transporte y que fueron pensados para cubrir lo que se conoce como “la última milla”.

Llaman la atención sus dos grandes ruedas con notorios frenos de disco, lo que adelanta que el Streetmate se desplazará a una velocidad más que aceptable: está previsto que viaje hasta 45 km/hora. Una mirada más cercana permite identificar otros interesantes detalles. El modelo ofrece seguridad y resistencia al desplazarse por las grandes ciudades. De hecho, una gran horquilla delantera expone dos amortiguadores y se conecta al manubrio igual que una bicicleta clásica.

La rueda delantera es más grande que la trasera, ofreciendo una posición más cómoda para el conductor. El marco se levanta un poco del suelo ofreciendo espacio libre sobre la mayoría de los obstáculos de la ciudad. Las ruedas delanteras y traseras están equipadas con guardabarros.

El Volkswagen Streetmate es 100% eléctrico y su batería está integrada en el piso del vehículo urbano. Esta fuente de poder se carga en tan solo 2 horas y 15 minutos. Pero eso no es todo, ya que este innovador diseño no solo permite que su conductor viaje de pie, sino que también sentado.

El asiento rebatible queda adosado a la horquilla si se quiere viajar de pié.
El asiento rebatible queda adosado a la horquilla si se quiere viajar de pié.

Esto se logra gracias a que parte de su marco es plegable y al manipularlo se extiende un asiento sobre la plataforma ofreciendo mayor comodidad al usuario.

Su motor eléctrico de 2.7 Hp está montado en la parte trasera del vehículo urbano. Al desacelerar, captura energía y la reutiliza posteriormente alargando así su autonomía hasta alcanzar los 60 kilómetros por carga con la carga de un pasajero.