La masiva renuncia de la redacción del suplemento feminista, del diario Vaticano L'Osservatore Romano, causó estupor en Europa.

El éxodo encabezado por su directora, la intelectual Lucetta Scaraffia, se anunció tras denunciar un intento de reinstalar la cultura de "mujeres obedientes" desde la Santa Sede. 

El grupo de periodistas fue quien expuso los abusos de sacerdotes y obispos contra monjas que fueron admitidos públicamente por el Papa Francisco.

A través de una carta enviada al Sumo Pontífice las trabajadoras de prensa expresaron que su línea editorial "no ha encontrado el apoyo de la nueva dirección de L'Osservatore Romano" debido al apartamiento de Giovanni Maria Vian en diciembre pasado.

Además las mujeres manifestaron "que se ha vuelto a la selección de mujeres de arriba, a la elección de colaboradores que aseguran obediencia y a renunciar a cualquier posibilidad de abrir un verdadero diálogo, libre y valiente".

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