Este domingo se difunció que el primer ministro británico, Boris Johnson, fue internado en un hospital como medida de “precaución” ante los “síntomas persistentes” provocados por el coronavirus.

El pasado 27 de marzo, el premier había informado que había dado positivo de la enfermedad que azota al mundo. Aunque tenía previsto volver a la actividad, finalmente decidió continuar en cuarentena porque seguía teniendo fiebre.

“Bajo las recomendaciones de su médico, el primer ministro ha ingresado en un hospital para que se realicen pruebas”, indicó el portavoz oficial del jefe de Gobierno en un comunicado.

“Esta es una medida de precaución, dado que el primer ministro continúa teniendo síntomas persistentes de coronavirus diez días después de haber dado positivo”, agrega esa nota.

Sin embargo, esto no es impedimento para que Johnson se mantenga a cargo del Gobierno y en contacto con sus ministros y altos funcionarios.