Verdaderas "armadas" de criaturas marinas, de aspecto ligeramente extraterrestre, han estado varando en las playas australianas gracias al clima cálido, conformando un extraño paisaje azul que los expertos recomiendan admirar pero no tocar. El fenómeno parece amplificarse por el calentamiento global y se encuentran noticias de invasiones similares en Miami.

Así puede lucir una playa cuando arriban las "armadas azules". Imagen: BBC.com / Charlotte Lawson
Así puede lucir una playa cuando arriban las "armadas azules". Imagen: BBC.com / Charlotte Lawson

Lo novedoso, en todo caso, es que se están distribuyendo en latitudes tan al sur como Australia o el Sur de Brasil, en dónde balnearios populares de Florianópolis ya han incorporado la "bandera violeta" para advertir a los visitantes de la presencia de colonias de las indeseadas visitantes.

La Dra. Lisa-ann Gershwin, experta en medusas, dijo que las “carabelas azules” habían estado apareciendo en las playas de Nueva Gales del Sur, Victoria, Australia Meridional y Tasmania en "números asombrosos" durante los últimos meses gracias al clima más cálido.
“Se están divirtiendo mucho este año y definitivamente nos están aterrorizando”, dijo Gershwin. “Son criaturas alienígenas realmente extrañas”. 

Una población de carabelas azules en movimiento se conoce como "armada" y la especie se relaciona evolutivamente con las medusas. Su nombre viene del aspecto de barco a vela que adquieren cuando varan sobre la playa con su enorme cámara de aire inflada.

Cada población flota libremente en la superficie del océano, compuesta por "un número increíble" de "colonias" individuales. Estas colonias son lo que comúnmente se conoce como "botellas azules", pero en realidad son una colección de partes semiautónomas fusionadas.
Cada colonia tiene individuos "zurdos" o "diestros", según la vela encima del animal esté inclinada hacia un lado o hacia el otro.

Cuando la brisa marina se levanta, se llevará solo una pequeña cantidad de colonias en un momento dado, asegurando que toda la población no se pierda en una sola ráfaga.
Cada colonia individual de carabelas azules es un organismo hermafrodita con órganos reproductores masculinos y femeninos, y cada uno de los componentes autónomos es responsable de sus propias funciones, como la alimentación o la reproducción.

Las botellas azules son presa de las "lagartijas marinas" o "babosa Pokémon". Los Glaucus a menudo son arrastrados a la costa junto con la botella azul, y tienen la apariencia de un lagarto, pero en realidad se trata de una babosa de mar que se alimenta de la colonia y "roba" sus aguijones para su propia defensa.

Lagartija o pokemon marino, una babosa que parasita a las carabelas y les roba los aguijones. Imagen: theguardian.com / Lisa Ann Gershwin.
Lagartija o pokemon marino, una babosa que parasita a las carabelas y les roba los aguijones. Imagen: theguardian.com / Lisa Ann Gershwin.

Gershwin dijo que aún quedaba mucho por aprender sobre la biología de esta "asombrosa hazaña de la naturaleza", ya que era difícil rastrear dónde se originaron y luego estudiarlos antes de que completaran su ciclo de vida.

Sin embargo, lo que se sabe es que es probable que los cambios complejos provocados por el cambio climático creen entornos de reproducción ideales para las medusas azules y otras especies de medusas que ya se reproducen "más rápido que los conejos". Por eso mismo, se espere que colonicen regiones en dónde hasta ahora no se las conocía.