Lombardía, en el norte del país, y la sureña Campania, quieren la autorización del Gobierno central para imponer desde esta semana un toque de queda nocturno para frenar la propagación del coronavirus.

Lombardía, que concentra 17.084 de las 36.616 víctimas que ha tenido Italia desde el inicio de la pandemia, experimenta en los últimos días un nuevo alza de los contagios que la han llevado a tener 24.634 de los 134.003 casos activos a nivel nacional.

Motor económico del país que aporta el 22% del Producto Bruto Interno (PBI), Lombardía registró el lunes una tasa de positividad del 11.5% sobre los test efectuados, más de dos puntos superior a la media nacional de 9.4%, según los datos del Ministerio de Salud italiano.

Campania, en el sur de Italia, cuya capital es Nápoles, propuso a través de su gobernador ,Vincenzo De Luca , poder instaurar el toque de queda desde las 23 del viernes.

La semana pasada, De Luca ya había ordenado el cierre de escuelas hasta el 30 de octubre, mientras Campania se mantiene hace días dentro de las tres regiones con más casos diarios y concentra hasta este martes 18.314 de los casos activos el país.

Otros tres países europeos, Francia, Bélgica y Eslovenia, ya adoptaron toques de queda nocturnos recientemente por el avance del coronavirus.