"Todos los Estados miembros deben reforzar sus medidas inmediatamente y ante la primera señal de potenciales nuevos brotes", dijo la funcionaria, estimando que es "tal vez la última oportunidad de evitar que se repita la situación de la pasada primavera" boreal.

Según Kyriakides , la situación actual es mucho peor que en marzo en varias regiones del bloque.

La funcionaria también observó que la flexibilización de las medidas de control en el verano europeo condujo "a un aumento en el número de casos".

"No podemos bajar la guardia. Esta crisis no ha sido superada", insistió , añadiendo que el invierno en el que entra Europa "es el período del año en que tenemos más enfermedades respiratorias".

La encargada de Salud del organismo resaltó que en algunos países se observa un hastío ante las medidas instauradas para frenar el avance del virus y un "desprecio por las normas", que algunas veces se traduce en protestas.

Kyriakides  pidió por tanto a los países que hagan "todo lo posible" para combatir la desinformación y las falsas noticias sobre el Covid-19, que crean "más confusión para los ciudadanos".