Una pequeña empresa australiana, SunDirve, sostiene una dura lucha contra los gigantes internacionales por el liderazgo tecnológico en generación fotovoltaica, la transformación de la luz solar en electricidad.

La empresa australiana que en septiembre le arrebató el récord de eficiencia en células solares al gigante chino Longi (una empresa con casi 6 mil millones de dólares en activos) acaba de alcanzar otro hito importante, con la producción de su primer panel solar fotovoltaico de tamaño completo.

SunDrive surgió en la Universidad de Nueva Gales del Sur y consiguió respaldo del multimillonario Mike Cannon-Brookes y la Agencia Australiana de Energías Renovables. Ayer anunció con discretos posteos en las redes sociales que comienza su producción destinada a hogares.

Pequeño equipo, gigantes logros. Instagram de sundrivesolar


Se trata de un gran acontecimiento para la empresa con sede en Sídney: es que ya podrá usar sus nuevas células solares en la producción de módulos fotovoltaicos de tamaño comercial, fabricados en Australia, para su uso en tejados domésticos.

La tecnología de SunDrive sustituye el creciente uso de la plata en las células solares -un obstáculo clave para la adopción generalizada de las tecnologías de nueva generación- por el cobre, que es mucho más barato y fácil de obtener. A los cotizaciones de estos días, cada kilo de plata es 76 veces más caro que un kilo de cobre.

El concepto fue desarrollado originalmente por el director general de SunDrive, Vince Allen, durante su doctorado en la Universidad de Nueva Gales del Sur. Posteriormente, Allen fundó SunDrive en 2015 con su compañero de piso universitario, David Hu.

En septiembre, la tecnología de SunDrive batió el récord mundial del 25,54% de eficiencia de una célula solar de silicio de tamaño comercial, superando el anterior récord del gigante solar chino Longi, que apenas en junio de este año había conseguido eficiencias del 25.21%.
La eficiencia de los paneles solares es la fracción del total de la energía lumínica que impacta que se logra transformar en energía eléctrica. 

Se trata de un parámetro decisivo porque cuando aumenta la eficiencia en la transformación, aumenta la cantidad de energía que los paneles generan por unidad de superficie, lo que terminará impactando en ahorro en el costo global de los proyectos y disminución en el costo de generación.

SunDrive se prepara para el siguiente paso: realizar minuciosas pruebas y ciclos para garantizar que la tecnología «supere y dure más» que sus competidores.
En definitiva, la empresa ha recorrido un largo camino desde que Allen y Hu iniciaron sus operaciones en un garaje de las afueras de Sídney en 2015. Desde entonces, SunDrive ha atraído a más inversores con mucho dinero, como Cannon Brookes y su esposa Annie, a través de Grok Ventures, así como Blackbird Ventures.

El panorama en Argentina y en Córdoba

La eficiencia de los paneles varía grandemente con diferentes factores, entre los cuales el tipo de panel utilizado es muy significativo: aunque los paneles de silicio policristalino son más económicos, su rendimiento suele ser más bajo que el de los de silicio monocristalino.

En promedio, la tecnología utilizada en nuestro país, puede rondar el 19%, nos dice Alejandro Herrerías de la oficina de proyectos industriales de Energe SA. Sin embargo, algunos de los paneles que ya se están utilizando en nuestro país alcanzan 21,15% de eficiencia.

La empresa, que ha desarrollado importante infraestructura para empresas privadas y dependencias oficiales en Mendoza, gestiona proyectos que comenzarán a generar en 2022 en Córdoba con este tipo de tecnología.

Lo importante, nos dice el experto, "es que existen hoy fuentes de financiamiento que permiten implementar los proyectos de modo tal que los préstamos sean pagados con los propios ahorros generados por el uso de los paneles, con el agregado de los beneficios ambientales de utilizar energía limpia".