El agente de policía de Minneapolis, Derek Chauvin, que aparece en un vídeo asfixiando con la rodilla a George Floyd, fue detenido este viernes bajo la acusación de asesinato en tercer grado y homicidio imprudente. La muerte de Floyd, un hombre afroamericano de 46 años, y su difusión en vídeo han desatado manifestaciones en esta ciudad del estado de Minnesota que han derivado en violentos disturbios, además de protestas en otras ciudades de Estados Unidos.

El arresto del agente Chauvin, y otros agentes involucrados, se produce poco después de que la vicepresidenta del concejo municipal de la ciudad diera a conocer una dramática novedad: la víctima y el agente que supuestamente le asfixió hasta la muerte eran compañeros de trabajo.

Según la concejal Andrea Jenkins, Floyd y el agente han trabajado en El Nuevo Rodeo, un restaurante mexicano de la ciudad.

"Ambos fueron agentes de seguridad del restaurante», aseguró Jenkins a la cadena CNN. «Fueron compañeros de trabajo durante mucho tiempo".

La dueña del restaurante, Maya Santamaría, aseguró a la cadena local KSTP que los dos trabajaron a la vez como "porteros" del local durante 19 años, aunque no pudo dar por hecho que mantuvieran relación.

Chauvin, que asfixió durante siete minutos a Floyd con la rodilla contra el cuello, cuando la víctima ya estaba esposada y a pesar de que no se había resistido a su detención, era un veterano de El Nuevo Rodeo. "Fue nuestro policía fuera de servicio durante casi la totalidad de los 17 años que llevamos abiertos", detalló Santamaría.

"Coincidieron en el trabajo", añadió la propietaria. "Solo que Chauvin trabajaba fuera y los guardas de seguridad estaban dentro".

El Nuevo Rodeo está, además, en las inmediaciones de la comisaría de policía en la que está asignado Chauvin y los otros tres policías involucrados en la tragedia. Los disturbios violentos han dejado decenas de edificios quemados y dañados, entre ellos, la propia comisaría y restaurantes cercanos al que fue el lugar de trabajo de Chauvin y Floyd.

La muerte de George Floyd, grabada en vídeo por una testigo, ha desatado protestas y una ola de indignación no solo en Minneapolis, sino también en otras ciudades de Estados Unidos.