Los investigadores Carolyn R. Bertozzi, Morten Meldal y K. Barry Sharpless han sido galardonados este miércoles con el Premio Nobel de Química 2022. Los científicos han sido galardonados por sus descubrimientos en relación con "el desarrollo de la química del clic y la química bioortogonal".

Durante mucho tiempo, los químicos se vieron impulsados ​a construir moléculas cada vez más complicadas. En la investigación farmacéutica, esto involucró la recreación artificial de moléculas naturales con propiedades medicinales, lo que dio lugar a muchas construcciones moleculares admirables, pero que consumen mucho tiempo y son muy caras de producir.

“El Premio de Química de este año trata de no complicar demasiado las cosas, sino de trabajar con lo fácil y sencillo. Las moléculas funcionales se pueden construir incluso siguiendo una ruta directa”, explicó Johan Åqvist, presidente del Comité Nobel de Química.

Sharpless, quien ahora recibe su segundo Premio Nobel de Química, acuñó en el 2.000 el concepto de química clic, que es una forma de química simple y confiable, donde las reacciones ocurren rápidamente y se evitan subproductos no deseados.

Poco después, Morten Meldal y Barry Sharpless, independientemente el uno del otro, presentaron la cicloadición de azida-alquino catalizada por cobre, una reacción química elegante y eficiente que ahora es de uso generalizado. Entre muchos otros usos, se utiliza en el desarrollo de productos farmacéuticos, para mapear el ADN y crear materiales que sean más adecuados para su propósito.

Carolyn Bertozzi llevó la química de clics a un nuevo nivel. Para mapear biomoléculas importantes, pero esquivas en la superficie de las células (glicanos), desarrolló reacciones de clic que funcionan dentro de los organismos vivos. Sus reacciones bioortogonales se usan globalmente para explorar células y rastrear procesos biológicos. 

Utilizando reacciones bioortogonales, los investigadores mejoraron la orientación de los productos farmacéuticos contra el cáncer, que ahora se están probando en ensayos clínicos.

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