Estados Unidos registró ayer jueves un récord de 60.646 casos de coronavirus, según la base de datos de la Universidad Johns Hopkins, en medio del mayor repunte de contagios en el país en dos meses y, mientras, más estados anuncian nuevas medidas sanitarias para contener sus rebrotes.

La cifra de casos de las últimas 24 horas supera al anterior récord de 60.021 contagios del 7 de julio en Estados Unidos, el país más afectado por la pandemia, de acuerdo a los datos de la universidad estadounidense.

Estados Unidos tiene ya al menos 3.115.345 casos de coronavirus y más de 133.000 muertos por la enfermedad, según Johns Hopkins, convirtiéndose en el único con más de 3 millones de casos.

Ante esta situación, más de 20 de los 50 estados tuvieron que frenar sus reaperturas o dar marcha atrás con ellas para contener el repunte del coronavirus.

Arizona, Florida, Texas y California son los estados más afectados.

El recrudecimiento del coronavirus en Estados Unidos es mala noticia para el presidente Donald Trump, que busca su reelección en noviembre y es muy criticado por su gestión de la crisis, su subestimación de la gravedad de la enfermedad y su premura en reabrir la economía.

Trump se negó a mostrarse en público con un tapabocas pese a pedidos de legisladores de su partido, tanto que el barbijo se terminó convirtiendo en un símbolo de la polarización política nacional, en el sentido de que utilizarlo o no es visto como rechazo o apoyo a Trump, respectivamente.

Entre los deportes que se suspenden figuran el fútbol americano y el fútbol.

Varios estados impusieron, más que recomendaron, al uso de tapabocas, entre ellos Texas, que está gobernado por un republicano.

Florida y Georgia, gobernados por republicanos, no obstante, se negaron a decretar la obligatoriedad del tapabocas.

Fuente: Télam