Tras cuatro meses con los colegios cerrados los estudiantes de último año de las escuelas secundarias de Wuhan, epicentro del coronavirus en China, volvieron a clases. Dentro de las medidas que tomó el gobierno para la vuelta a las aulas están el uso obligatorio de barbijos, detectores de temperatura y cumplir con el distanciamiento social. 
Cuando llegó el coronavirus al China el ciclo lectivo ya se encontraba paralizado por las festividades de año nuevo. La jornada del miércoles marcó el regreso a las aulas para los alumnos de Wuhan que se vieron cara a cara por primera vez en el año. Es una forma de decir: tenían que llevar barbijo; además deben pasar por cámaras infrarrojas para detectar posibles casos de fiebre. En algunos colegios los pupitres fueron revestidos con biombos de acrílico para evitar contagios. Además, alumnos, maestros y personal no docente estuvieron en aislamiento durante las dos semanas previas a la reapertura.
Los adolescentes se mostraron contentos con al vuelta a clase. "Por fin recomienza la escuela", dijo una alumna en la red social Weibo. "Es la primera vez que estoy tan contenta de volver a clases, a pesar de que tengo examen en dos días", agregó. Los y las jóvenes de Wuhan se encontraron con una nueva disposición de las aulas por la pandemia: tuvieron que sentarse en mesas individuales separadas un metro una de otra, de frente a sus profesores. Además, se les entregarán dos barbijos por día. Los aulas fueron acondicionadas para que solo entren 30 personas. Desde enero las escuelas permanecían en receso, antes de que se decretara la cuarentena en Wuhan y en toda la provincia de Hubei, ubicada en el centro de China. Como en el resto del país, desde aquel entonces los estudiantes seguían los cursos por internet.
Sin embargo las autoridades de Hubei reanudaron las actividades escolares de manera diferenciada. La fecha de inicio de las clases para las otros años de la secundaria, así como para los alumnos de la escuela primaria, aún no fue anunciada. También en las gigantescas metrópolis de Beijing y Shanghái sólo los estudiantes del último año de la secundaria volvieron a las aulas. Deberán ponerse al día para los exámenes finales cuyas fechas fueron postergadas un mes, hasta principios de julio.

Los casos declarados de coronavirus se redujeron de manera drástica en China las últimas semanas. Los número totales parecen estancados en 4.633 muertes  y en torno a los 83 mil casos positivos, con apenas 2 o 3 nuevos positivos diarios. La Comisión Nacional de Salud informó que 395 personas siguen hospitalizadas por la enfermedad. Otras 949 se encuentran bajo aislamiento y en observación por tratarse de casos que dieron positivo al coronavirus pese a no mostrar síntomas, según informó la agencia de noticias china Xinhua. Wuhan había permitido la entrada y salida de personas de la ciudad recién el pasado 8 de abril, tras 76 días de aislamiento. Las autoridades de Salud de la provincia informaron que allí no hay nuevos casos de la covid-19 desde hace 32 días.