No comenzó bien el partido en Turín para la Juventus. Terminó perdiendo el primer tiempo 1 a 0 y era todo preocupación para el elenco de Maurizio Sarri.

En la segunda parte el técnico no esperó y metió a Higuaín para buscar la remontada ante un equipo que nunca había ganado en suelo italiano y que, de momento, estaba dando la sorpresa.

La Juve lo seguía intentando, sin conseguir el deseado premio del gol. Cuando el partido se acercaba al final, Dybala recibió en la frontal, tras un pase de Cuadrado, y colocó el esférico en la escuadra derecha de la meta que defendía Guilherme. Empate y último empujón para buscar la remontada.

El segundo no se hizo esperar y llegó dos minutos después, también a través del delantero argentino, luego de un rebote del arquero.