En la Sala AMIA, de Comodoro Py, comenzó este martes el juicio oral y público contra la expresidenta Cristina Fernández y doce acusados más. Gran parte del país estuvo atento a este suceso, ya que se trata de uno de los juicios más importantes que afronta el gobierno anterior y donde se investiga la adjudicación de 51 obras públicas.

Junto a la expresidenta, están acusados su exministro de Planificación, Julio De Vido y Lázaro Báez. La exmandataria llegó al Tribunal acompañada de figuras políticas y recibió el apoyo de militantes en las afueras de Comodoro Py. Cerca del mediodía comenzó la lectura de la acusasión.

A las 15 horas se dio por finalizada la audiencia y el tribunal abrió un cuarto intermedio hasta el próximo lunes 27 de mayo. En ese momento Cristina Fernández se retiró del recinto.

En Twitter, fueron tendencia los hashtags #FuerzaCristina y ·#LaBandaAJuicio. El primero se utilizó principalmente para apoyar a la expresidenta y el segundo para mostrarse críticos con los acusados. Previamente, Cristina Fernández había publicado un hilo reflexionando sobre los motivos del juicio y criticando al gobierno actual.

Uno de los abogados de la expresidenta, Gregorio Dalbón, declaró que "el juicio terminará en la nulidad". Dejó en claro que no será un juicio breve ni simple, dada la cantidad de acusados y los expedientes a analizar. Por otra parte, Oscar Parrilli, ex Secretario General de la Presidencia, calificó al juicio como "una puesta en escena".

El ministro de Justicia Germán Garavano, a quién se lo acusó de promover este juicio que opositores tildan de persecusión política, expresó su negativa al respecto: "No, no es así, ella está enfrentando un proceso y está en una etapa de defensa".