Los jubilados vienen de perder, en 2018, un 13 por ciento de su poder adquisitivo.

Se trata del primer año en el que se implementó la nueva fórmula de cálculo de haberes, Reforma Previsional mediante.

Ahora, con los efectos de la devaluación aún por determinarse, aspiran a "no perder".

Con el futuro aumento de septiembre en marcha (la mínima alcanzará los $ 12.937), se conocen los datos que marcan la pauta de los aumentos.

El cálculo tiene en cuenta, en un 70 por ciento el Índice de Precios al Consumidor (IPC) y el resto en virtud de las modificaciones de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE).

De acuerdo al cálculo, en el último de los cuatro aumentos trimestrales le correspondería una suba del 8,74% en el mes de diciembre.
Así completaría un 51 por ciento en 2018, superando los 14.000 pesos a fin de año.

Los aumentos de las jubilaciones cerrarán 2019 cerca del 51 por ciento