La volatilidad y la crisis económica obligaron al Banco Central a establecer controles con el flujo de capitales. No sólo los pases de futbolistas quedaron en el radar de la máxima autoridad monetaria del país. También los derechos de autor, licencias de marcas, patentes o dominios de internet.

La flamante normativa del organismo establece que quienes perciban dinero en moneda extranjera por la venta de "activos no financieros no producidos" deberán ingresar ese monto en el país y liquidar en el mercado de cambios, vender, en un plazo máximo no mayor a los 5 días hábiles.

Es decir, los clubes estarán obligados no sólo a traer al país el dinero de cada una de las transacciones, sino también de liquidarlos en moneda argentina en un plazo perentorio.

Por ejemplo, Boca Juniors vendió a Darío Benedetto al Marsella por 16 millones de euros. Antes de la normativa del Central, no existían plazos ni derectiva alguna para transformar esa suma en moneda nacional.

La norma tomó por sorpresa a los clubes de fútbol y están analizando, junto a sus asesores legales, los efectos que puede traer a las alicaídas arcas del fútbol doméstico.