La economía se metió de lleno en la gran final que se disputará en el estadio del Atlético de Madrid.

Primero fue  Jurgen Klopp, el técnico del Liverpool. Expresó que la capital de España es muy cara, pero no tanto como Bakú,  Azerbaiyán, donde se disputará la final de la Europa League, entre el Chelsea y el Arsenal.

Luego llegó el turno del entrenador argentino. Denunció los exhorbitantes precios de los hoteles de Madrid, poniendo en duda que sus familiares y amigos puedan estar en el Wanda Metropolitano.

"Ayer llamé a algunos hoteles para reservar cuartos, la verdad, los precios son de locos. No sé si irá mi familia y algunos amigos de Argentina" afirmó el rosarino.

La final se desarrollará el 1 de junio en el Wanda Metropolitano y Pochettino puede convertirse en el cuarto director técnico argentino que puede ganar la Copa de Campeones de europa.

Los equipos y parciales de Inglaterra, en pleno Brexit, no parecen estar muy de acuerdo con los precios que los esperan en Madrid.