La Giralda es uno de los bares más antiguos de Buenos Aires que fue inaugurado en 1930 y por el que pasaron grandes figuras de la política y el arte de nuestra historia nacional.

Sin embargo, tras casi sesenta y ocho años de funcionamiento, no logró esquivar la crisis económica del macrismo y debió cerrar sus puertas asfixiado por el tarifazo cambiemita y la caída estrepitosa del consumo.

Lo más increíble de todo no es que reabrió esta semana luego de dos años de ausencia. Lo que resulta inverosímil, es que fue uno de los lugares elegidos por María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta para continuar por estos días con su raid de campaña y sacarse fotos comiendo churro.

Nada más asintomático que grafique con precisión el cinismo con el que algunos hacen campaña.

La mañana se editorializa con Cristian Maldonado - NDOM (27/08)