La facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba, desarrolló un trabajo de investigación para determinar de qué manera el enfrentamiento bélico entre Rusia y Ucrania, afecta a las variables del comercio internacional, donde nuestro país desarrolla sus actividades de exportación e importación.

Al respecto, el Vicedecano de la Facultad, Dr. Ricardo Descalzi, fue consultado por Canal U y señalo en primer término que “ante este conflicto que al parecer va a durar un tiempo, las consecuencias son en primer lugar una retracción de la demanda global, aparentemente el mundo se recuperaría a una tasa menor a lo previsto debido a la aparición de este conflicto bélico”, a lo que agregó que “el otro efecto es la inflación a nivel mundial que estaría siendo aún más elevada, sobre llovido mojado, las expectativas de inflación ya eran elevadas por este dólar débil que estábamos viendo, por la inflación incipiente en Estados Unidos, a lo que se le sumaría la presión alcista de las materias primas.”

Al abordar las implicancias que esta situación podría ocasionar en la inflación de la Argentina, cómo el conflicto bélico afectaría el comercio internacional de nuestro país con los países en guerra, el Vicedecano señaló que “el gran problema ahora es el precio del gas, que Argentina exporta, estaríamos teniendo precios más elevados de este insumo, lo que se da en una situación donde tenemos un déficit primario muy alto, de hecho Argentina esta renegociando con el FMI la reducción de este déficit. Dentro de esa ecuación presupuestaria, los precios del gas son muy importantes.”

En esta nota, Descalzi también se refiere a los acuerdos que Argentina pueda lograr con el Fondo Monetario para el pago de la deuda externa, la pautas inflacionarias, los subsidios y el control del déficit fiscal de nuestro país.

Quisimos saber si el desbalanceo económico ocasionado por la guerra, no sólo afectaría a las importaciones sino que también se verán afectadas las exportaciones, a lo que el Vicedecano de la FCE explicó que “con relación al comercio con Rusia, Argentina no tendría mayores problemas, por ser muy dependiente de sus commodities como las oleaginosas o el trigo, y por ese lado tendríamos a lo mejor sólo impacto positivo porque las grandes regiones que están en guerra son competidores de Argentina, entonces tendríamos mejoras en los precios internacionales que afectaría a los ingresos fiscales por el lado de las retenciones pero no de la forma tan grande que lo está haciendo por el lado de las importaciones.”

En cuanto al balance comercial de la Argentina, derivado de esta guerra, Descalzi explicó que “está decayendo, si bien durante el año pasado tuvimos un superávit importante, hoy por hoy las importaciones están creciendo al triple de lo que lo están haciendo las exportaciones”, a lo que agregó que “se generaría un alivio por parte de la entrada de divisas a partir de la mejora de los precios internacionales.”

Finalmente el Vicedecano manifestó que “hay países que aprovechan mejor que otros los aumentos de los precios internacionales y según el estudio que hemos realizado, esos países son los países ordenados desde el punto de vista económico y financiero. Es como en nuestra casa, cuando hay problemas presupuestarios y hay que recortar el gasto, aquellas familias que ya tienen un ahorro previo, de hecho se les hace más fácil. Diferente es la situación en los países donde no ahorran y ahí la situación financiera es más complicada y hay que empezar a recortar en el corto plazo y todo se complica, a esto lo vemos continuamente tanto en la macro como en la microeconomía. En la facultad nuestra de Ciencias Económicas, en la Maestría de Comercio Internacional, trabajamos con muchas empresas, y el grave problema para la internacionalización de estas empresas, es la continua variación de las reglas de juego, la incertidumbre con relación a los aspectos impositivos y lo que provoca la reacción del gobierno para acomodar sus cuentas y nuestro problema endémico de complejidad financiera”