Este viernes por la noche en Texas, a los 94 años, falleció el expresidente de Estados Unidos George H.W. Bush, según confirmó un vocero de la familia, Jim McGrath.

Entre 1989 y 1993 se desempeñó como el 41er presidente del país. Ocho años después fue testigo de cómo su hijo, George W., se convertía en el 43ro mandatario.

George Bush padre, fue el presidente que selló el fin de la Guerra Fría y derrotó a Sadam Hussein en la Guerra del Golfo.

Representaba un republicanismo moderado y pragmático que echa chispas en su contraste con la era de Donald Trump.

Llevaba varios años con problemas de salud, aquejado de la enfermedad de Parkinson. Su esposa, Bárbara, con la que estuvo casado 73 años, había fallecido en abril.

Las condolencias llegaron de todas partes del mundo.

Donald Trump, quien se encuentra en la ciudad de Buenos Aires por la Cumbre del G20, compartió un comunicado destacando su liderazgo. "Con su esencial autenticidad, agudo ingenio, y compromiso inquebrantable con la fe, la familia y el país, el presidente Bush inspiró a generaciones de compatriotas estadounidenses hacia el servicio público", señaló.

Por su parte, el expresidente Barack Obama, quien ya elogió su política exterior en vida, lo definió como un ejemplo de que el servicio público puede ser una llamada “noble y feliz”. “Lo hizo muy bien durante su viaje. Expandió la promesa de América a los nuevos inmigrantes y las personas con discapacidades. Redujo la amenaza de las armas nucleares y construyó una amplia coalición internacional para expulsar a un dictador de Kuwait. Y cuando las revoluciones democráticas florecieron en la Europa del Este, fue su mano firme y diplomática la que consiguió terminar la Guerra Fría sin disparar un solo tiro”.